"Entrar en el aula preparada para
impartir una clase no solo significa tener claros los objetivos de enseñanza,
los materiales que se van a utilizar, las dinámicas que se van a implementar,
es algo más. Implica tener presente el lugar en el que se va a impartir la
clase, entender el aula como espacio propiciador de la interacción y el
aprendizaje."
Y es muy cierto que en el aula estamos
pasando o pasaremos muchas horas. El aula no es solo un espacio físico, que lo
es, sino también es un lugar en donde queremos ir porque queremos aprender, un
lugar donde no debe importar los errores, podemos aprender de ellos y hacer que
ese aula sea de todos, del profesor y de todos y cada uno de los alumnos que
conforman el grupo.
Pues bien, hoy os quiero presentar mi aula ideal donde me encantaría hacer mía esa frase de Vicenta "el aula como espacio propiciador de la interacción y el aprendizaje". En principio, está concebida para alumnos jóvenes, de 15 a 18 años, que es la primera vez que vienen a España a un curso de inmersión de español. Hay tres espacios diferenciados: sillas con sus mesas en forma de U (no lo he dibujado, pero hay tanto para diestros como para zurdos)-, un rincón de la calma, con pufs y sillones donde los estudiantes pueden leer, escuchar música (española) y relajarse (con biblioteca) y el rincón de proyectos. Se separan estos dos últimos con paneles deslizables donde se pueden ir poniendo posters, noticias, sobre los distintos proyectos que vayamos haciendo. Tienen distribuidos por la clase un armario para material, un rincón digital (con tablets y ordenador para consultar y puntos de carga), un armario para los portafolios y un punto de reciclaje. Hay unos grandes ventanales porque la luz natural es esencial en una clase y también en la zona de lectura hay unos focos, en caso necesario. Hay mesas y sillas apilables y ahora mismo pegadas a la pared. Cuando necesiten trabajar en grupos se puede hacer una disposición distinta.
Creo que es importante dejar suficiente espacio para personas con movilidad reducida, con mesas adaptadas y que no tengan barreras arquitectónicas: así pueden desarrollar su aprendizaje de la misma manera.
Otro elemento que he incorporado son las plantas, en mi opinión, estar en contacto con la naturaleza ayuda a crear un clima agradable en clase.
Creo que me encantaría ir a esa clase a enseñar... ¿y a ti? ¿Espero tus comentarios!

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